Que tu página web tenga una tasa de conversión demasiado baja demuestra que algo no se ha hecho del todo bien en su programación y diseño.
Y como expertos en desarrollo web en Pamplona nos gustaría contarte cuáles suelen ser las principales causas de este bajo rendimiento. Porque una tasa de conversión baja impedirá que saques el máximo partido a tu web y, sobre todo, te impedirá alcanzar tus objetivos. Veamos a qué puede deberse.
¿Qué es la tasa de conversión?
La tasa de conversión es uno de los principales KPIs que se analizan para valorar la buena marcha de una página web y de su estrategia digital.
Es un dato que indica cuántas de las visitas a la web han realizado una acción, sea esa acción comprar un producto, solicitar un presupuesto, concertar una cita o suscribirse a una newsletter.
Llegados a este punto es importante recordar que conversión no es igual a venta sino a acción. De ahí que cada página web, en función de sus objetivos, determinará los parámetros que medirán su tasa de conversión. En un e-commerce podrán ser las ventas pero en un blog pueden ser sus suscripciones a la newsletter.
¿Cómo se calcula?
Su cálculo es sencillo: se trata de dividir el número de visitas que realizan una acción concreta en tu web en un periodo de tiempo determinado entre el número total de visitas recibidas en ese mismo periodo y multiplicar el resultado por 100.
Y como decíamos, acción no significa venta sino que debe ser “algo” definido previamente junto al resto de KPIs de la estrategia digital. Resumiendo:
Tasa de conversión= Número de visitas que realizan una acción / Número total de visitas X 100
Aunque es un dato muy discutible ya que depende del tipo de web y los objetivos que persigas, los gurús del marketing aseguran que una buena tasa de conversión está entre 1,5 % y un 3 %, aunque hay quien sitúa este dato entre el 5 % y el 7,5 %.
Tres posibles causas de una tasa de conversión baja que deben evitarse al programar y diseñar una web.
1.- Diseñar un sitio web responsive
El tráfico web procedente de dispositivos móviles ha aumentado un 35 % en los últimos dos años, superando con creces al procedente de equipos de sobremesa y portátiles.
Que tu página web no sea responsive, es decir, no permita su óptima visualización en los dispositivos móviles, es una razón que explicaría su baja tasa de conversión. Navegar por un sitio donde no se visualicen bien las imágenes o los contenidos es un motivo perfectamente justificado para abandonar la navegación y, en la mayoría de los casos, sin realizar ninguna acción.
2.- Diseñar un sitio web con una buen estrategia de CTAs
Las CTAs o llamadas a la acción son claves en la tasa de conversión. Su propio nombre lo deja claro: deben llamar, promover, facilitar y conseguir que el usuario realice una acción en la web. Por ese motivo es tan importante establecer una estrategia de CTAs que incentive las acciones como ya te contamos en este post.
Un sitio web debe contar con CTAs estratégicamente diseñadas y ubicadas para que los usuarios realicen acciones concretas como solicitar un presupuesto, suscribirse a una newsletter, descargar un contenido o, una fundamental, realizar una compra.
3.- Diseñar un sitio web con navegación intuitiva y sencilla
Una de las cosas que más pueden desesperar a un usuario es intentar ver o leer un contenido online y que le resulte imposible por la cantidad de elementos intrusivos que se lo impiden. Popups de suscripción, popups para descargar contenidos, banners con publicidad, formularios, chatbots… Lo mismo podemos decirte si busca un contenido que no encuentra por ningún lado en las diferentes secciones de la web.
Por este motivo, que la web sea compleja, no tenga un menú claro, que no permita una navegación intuitiva o que está plagada de elementos emergentes, hará que la tasa de conversión no sea buena.
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